Esta torre es parte del sistema de atalayas del Reino nazarí de Granada, y su finalidad era la de vigilar y proteger la costa de Sorvilán y la alquería de Balysana contra los posibles ataques enemigos.
Dirección
N-340, km. 366
18713 Melicena Granada
España
Parcela
Comarca
Consejos para llegar
Situada al pie de la N-340 (carretera de Almería), debemos dejar el coche o bien justo antes de la salida del anejo de Melicena, en una explanada que se abre a la derecha (dirección Almería), o bien algo más adelante, en el parking del mirador del Peñón de San Patricio (si bien en este caso, tendremos que volver andando por el arcén de la carretera hasta el cartel de salida del núcleo de Melicena). Justo en ese punto, donde está el mentado cartel, arranca un camino en cuesta, a la izquierda de la carretera, que permite acceder hasta la torre. Es un camino de, aproximadamente, medio kilómetro, bien delimitado, con buen firme, pero con algunos tramos con estrechas escaleras. También hay zonas de descanso, con bancos, a modo de mirador.
Melicena es una de las poblaciones costeras pertenecientes al municipio de Sorvilán. La presente torre formaba parte del sistema defensivo de la costa del Reino nazarí de Granada, que contaba con varias de ellas distribuidas por este territorio frontero al mar.
Se encuentra situada en un pequeño cerro, a 105 metros sobre el nivel del mar, cercano a la población mencionada, entre los barrancos del Saltadero y Santa Catalina. Es una torre atalaya de época árabe, con planta cilíndrica, de 4,9 metros de diámetro, y cuya altura total conservada es de 10,5 metros. Destaca su vano de entrada, que se sitúa a seis metros de altura, orientada al norte. La torre está construida con mampostería de lajas de tamaño mediano formando hiladas, con enfoscado exterior de mortero de cal. Conserva, entre otras cosas, la azotea, los pisos y las diversas remodelaciones que fueron llevadas a cabo por los Reyes Católicos tras su reforma en el s. XVI. Dentro de estas reformas destacamos una gárgola de piedra y un matacán sobre la puerta de entrada a la torre, del que quedan en la actualidad las dos ménsulas en las que se apoyaba.
Con posterioridad, en los siglos XVII, XVIII y XIX también sufrió otras remodelaciones y usos, que han configurado su aspecto actual. En general, el estado de conservación de la torre es bueno.
Accesibilidad
Recomendamos un acceso a pie, ya que los tramos de escaleras no son accesibles con bicicleta. El sendero dispone de diferentes miradores en los que se debe parar para apreciar el paisaje costero. Al tratarse de un camino de tierra y en subida, es dificultoso para personas con movilidad reducida, e inaccesible para sillas de ruedas.
Mapa
- García-Consuegra Flores, J. M.; Rodríguez Aguilera, A. (2016): "Arqueología de la defensa de la costa del Reino de Granada en época moderna. La torre vigía de Torrenueva (Motril, Granada)". Revista del Centro de Estudios Históricos de Granada y su Reino 28: 231-267.
- Malpica Cuello, A. (1996): Poblamiento y castillos en Granada. Barcelona, Legado Andalusí, pp. 205 / 327.
- Martín García, M. et alii (1999): Inventario de arquitectura militar de la provincia de Granada (Siglos VIII al XVIII), Granada, Diputación de Granada, pp. 49-50.
Esta torre es parte del sistema de atalayas del Reino nazarí de Granada, y su finalidad era la de vigilar y proteger la costa de Sorvilán y la alquería de Balysana contra los posibles ataques enemigos.
Dirección
N-340, km. 366
18713 Melicena Granada
España
Parcela
Comarca
Consejos para llegar
Situada al pie de la N-340 (carretera de Almería), debemos dejar el coche o bien justo antes de la salida del anejo de Melicena, en una explanada que se abre a la derecha (dirección Almería), o bien algo más adelante, en el parking del mirador del Peñón de San Patricio (si bien en este caso, tendremos que volver andando por el arcén de la carretera hasta el cartel de salida del núcleo de Melicena). Justo en ese punto, donde está el mentado cartel, arranca un camino en cuesta, a la izquierda de la carretera, que permite acceder hasta la torre. Es un camino de, aproximadamente, medio kilómetro, bien delimitado, con buen firme, pero con algunos tramos con estrechas escaleras. También hay zonas de descanso, con bancos, a modo de mirador.